Buenos Aires y Santa Rosa (2b)- Si tu día anduvo bravo, ni te contamos la jornadita que tuvo que vivir el senador nacional y candidato a gobernador por el radicalismo Juan Carlos Marino. Es que, luego de desayunarse con la noticia «bomba» del adelantamiento de las fechas previstas en el cronograma electoral pampeano, encima por la tarde se tuvo que hacer cargo, nada menos, que de una amenaza de bomba en la Biblioteca del Congreso, cuya presidencia de la bicameral que la administra está en manos del pampeano.
Más allá de la broma, el caso ocurrido esta tarde en el Congreso nacional fue alarmante. Ocurrió cerca de las 16, cuando personal de seguridad encontró un artefacto sospechoso dentro de uno de los baños de la Biblioteca del Congreso, sobre la avenida Hipólito Yrigoyen al 1750: por esta razón se procedió a evacuar todo el edificio, como se hace habitualmente en estos casos. Marino, en medio de la conmoción, atendió a las decenas de periodistas que llegaron al Congreso, o que mejor dicho ya estaban ahí.
¿Por qué? porque el artefacto se detectó minutos antes de que comenzara en la Cámara alta la sesión especial convocada por el oficialismo para tratar el posible desafuero de la ex presidenta Cristina Kirchner y generó preocupación en el recinto, ya que fue encontrado en medio de una jornada marcada por múltiples amenazas de bomba en la Ciudad de Buenos Aires, todas relacionadas con el inminente inicio de la Cumbre de presidentes del G-20.
Pasado el susto, Marino sostuvo: «En relación a la evacuación de la Biblioteca del Congreso y del anexo del Senado, les informo que se encontró un artefacto electrónico desconocido en uno de los baños. Se actuó de acuerdo al protocolo y se tomaron todos los recaudos necesarios». Y añadió: «El sistema de seguridad de la Biblioteca funcionó a la perfección. Comienza ahora la investigación correspondiente para determinar la procedencia y encontrar a los responsables.
Deja tu comentario