Santa Rosa (2b)- Se levantó medio campamento frente al IPAV y esta tarde se promocionó como el fin del conflicto que se inició tras l adjudicación de 1009 viviendas sociales en Santa Rosa. Pero no: lo cierto es que un grupo de mujeres persiste en el reclamo arrancando su sexto día de lucha. Esta mañana el Gerente del IPAV Rogelio Schanton se reunió con un grupo mujeres que habían sido inscriptas antes del 2012 y que estarían en condiciones de recibir la vivienda social y decidieron ponerle punto final al acampe, pero otro grupo de mujeres avisó que de ahí no se mueve.
Desde el Instituto Provincial Autárquico de Viviendas (IPAV) aclararon que no hay garantía de poder conseguir la vivienda, aunque el acuerdo permitiría llegar a casas que, por alguna denuncia o irregularidad en la pre adjudicación, queden liberadas. Pareciera haberse solucionado el conflicto después de quedar parte del acampe vacío, pero no todo es lo que parece.
El resto reclama falta de empatía con el grupo sólido que se había conformado desde el primer día protesta. Solo 18 personas hicieron un acuerdo con el Gerente el resto quedó en pampa y la vía. Se encuentran desamparadas y exigen custodia policial porque dicen haber sido amenazadas por este grupo que ya consiguió arreglar.
Mientas dicen haber solucionado, aún quedan mujeres en situación de calle que en este momento están siendo acompañadas por el colectivo feminista, pidiendo por redes sociales agua, leche, frazadas y pañales.
Lorena una de las referentes del grupo manifestó en radio Kermes que se encuentra muy afligida pasando su sexto día, lleva 13 años anotada. Sostiene que eran un grupo unido reclamando por una vivienda y que el arreglo fue solamente para un grupo de personas que estaban acomodadas. El conflicto se acrecienta aún más porque estas mamás se encuentran desprotegidas y con temor, por eso solicitan refuerzo policial para poder pasar la noche. “Necesitamos quien nos cuide de noche, están los chicos, estamos solas “expresa.
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