Por meter mano: el productor encontrado muerto en un campo de Embajador Martini se intoxicó con “fosfina»

697
Compartilo:

Santa Rosa (2b) – Después de un mes, se conocieron las causas de la muerte de Leonardo De Bruyn, el productor de 72 años encontrado sin vida junto a sus perros en un campo cercano a la localidad de Embajador Martini. Las pericias indicaron que murió por “un manejo imprudente de materiales tóxicos”. En su cuerpo y en el de uno de los perros hallaron “fosfina”, un gas que se produce por el contacto con el aire de las pastillas de fosfuro de aluminio, que se utiliza para matar insectos en los lugares donde se acumulan granos.

La novedad la dio el fiscal Guillermo Komarosky (foto), en diálogo con el canal Somos Noticias de General Pico. «Se encontró la presencia tanto en las vísceras y jugo gástricos de De Bruyn como en el hígado y jugo gástrico de uno de los perros de un material o elemento tóxico denominado ´fosfina´», relató el fiscal, quien derivó los resultados al médico forense para completar el informe de la autopsia y determinar la causa del edema pulmonar severo que lo llevó a la muerte.

De Bruyn fue encontrado muerto hace un mes, por un vecino que fue hasta su campo. Como no atendía, miró hacia el interior de la casa y vio al hombre tirado en el suelo. La policía ingresó al lugar y encontró sin vida al productor y a varios de sus perros. Una semana después, se realizó un impresionante operativo con bomberos y especialistas para recoger muestras en la zona.

Con los resultados en mano, Komarofky dijo que “la fosfina es un elemento que se utiliza en el campo para matar cierto insectos o ciertas alimañas, o para desratizar también. Actúa en contacto con el aire de forma gaseosa y la persona en este caso la ha aspirado”. Y agregó “es letal de acuerdo a la bibliografía que citan los peritos al momento de determinar el alcance de este producto, si no se maneja con las precauciones del caso”.

 

El fiscal piquense indicó que “por la escena del hecho llegamos a la conclusión de que se trató de un manejo imprudente de materiales tóxicos». Y concluyó “si bien en la casa no se encontraron pastillas de fosfina si había en el galpón, sospechándose que las podría haber utilizado en la vivienda, dando como resultado la intoxicación de manera accidental”.

Químicamente, la fosfina es un gas incoloro, inflamable a temperatura ambiente y puede oler a ajo o a pescado. El mismo se produce cuando las pastillas de fosfuro de aluminio -que se colocan en los granos almacenados como habría hecho el productor pampeano – interactúan con la humedad del aire. La Agencia de Protección Ambiental estadounidense (EPA) clasificó a la fosfina como clase Ib (muy tóxica).

Fotos Infotec

Compartilo:

Deja tu comentario